Canto de gol: Nunca den por muerto a Millonarios

Seguramente es una frase que hemos escuchado mucho con muchos equipos. Pero anoche, aún con la victoria contra Pasto muy latente, estaba escuchando el relato de Jotas Mantilla del segundo tanto de Juan Pablo Vargas. «Nunca den por muerto a Millonarios» es el cierre de esa emoción con la que relata el 2-3. 

Tres situaciones se me vinieron a la cabeza con la frase de Jotas. Y arrancaré con la individual: fue maravilloso que el ‘Tico’, después de un partido tan flojo en La Paz y de su error en el descuento pastuso, tuviera el desquite y el premio de ser el responsable de la remontada azul. «Pecar y rezar» dije en la crónica del juego, pero no se quedó allí o que pasara de victimario a figura de la cancha en los mismos minutos, sino que sumara otro pilar a su historia con Millos al ser junto con ‘El Nano’ Prince los únicos centrales en marcar dos dobletes.

El camino en Copa Libertadores de América fue la segunda remembranza. Fue una sorpresa enorme leer a tantas personas afirmar que Millonarios ya estaba eliminado después de su derrota en Bolivia, a sabiendas de que tenemos que hacer una tarea accesible de ir a ganarle a Palestino y otra obligatoria de ganar los seis puntos en Bogotá. Ello, sumado a que con un plantel con tantos errores propios casi logra empatar en la altura, me lleva a preguntar por qué es tan increíble pensar en que Flamengo no ganará los dos duelos contra Bolívar. Pesimismo exacerbado.

El último de mis pensamientos giró en torno a la labor inmediata y no menos importante: ganar este miércoles en Bogotá y el sábado en Pereira. Dos partidos, contra un rival demasiado directo que le da un valor extra por la tabla y la historia reciente, y contra un local que podría llegar o clasificado o a tiro de que lo alcancemos. Después de estar al borde de la eliminación, Millos tiene hoy la mejor opción por la diferencia de gol y sueña con llegar a Chile tranquilo y al borde de estar dentro de los ocho.

La revancha de Juan Pablo Vargas y escribir otra página en la historia albiazul con su gol al 88’. Las cuentas no sencillas pero tangibles y reales en la disputa continental. Y la confianza para los 180 minutos de dos finales en el Campín y el Hernán Ramírez Villegas, con Leo, Dani, Cataño y Macka descansados y ojalá disponibles. Que a los rivales y a nosotros mismos les y nos quede siempre claro: nunca den por muerto a Millonarios.

El canto de gol para acompañar esta columna es ‘Voodoo Mama’ del compositor californiano Justin Hurwitz:

Carlos Martínez Rojas
@ultrabogotano