Rionegro Águilas - Millonarios

De la bronca vendrán los puntos

Así, con rabia, con indignación, con malestar fue como salieron los jugadores de Millonarios del estadio Alberto Grisales el pasado domingo tras el anémico 0-0 con las Águilas de Rionegro. El equipo iba por los tres puntos, de eso se habló durante toda la semana, para eso se prepararon física y mentalmente.

Un accionar inesperado dejó al equipo con diez hombres y ahí hubo que acudir más a la inteligencia que a otra cosa para darle manejo a la situación. Cuando el equipo de Rionegro y sus seguidores esperaban ver al azul y blanco de Bogotá colgarse de los palos para enfrentar la arremetida local y así lograr su primer gol en Liga y los primeros tres puntos, pasó todo lo contrario. Millonarios nunca se amilanó, fue al frente, como un corcel herido que sabe que tiene que llegar si o si a la meta porque si se detiene, muere.

Millonarios mostró que mentalmente es un equipo fuerte, y al ver que su rival con un hombre de más no lo pudo inquietar, se fue desbocado a la guerra, a buscar la hazaña. Con un Mosquera que quiso tomar las riendas del partido y darle buen trato a la pelota, un Quiñones que tiene claro que el futbol se juega y se gana es dándole para adelante, un Arango que entró con hambre a tratar de romper la defensa, y hasta un Cadavid que empujó al equipo desde atrás y en una salida con balón dominado, al piso, como si fuera un volante más, terminó provocando la expulsión de Roque Caballero en el minuto 79.

Ese es el Millonarios que es bueno ver, que no se rinde, que no se conforma, que no tiene en su vocabulario empatar, y perder menos. Al final, ese punto que se trajo el equipo, si bien suma, no fue suficiente. La hinchada que viajó, la que vive allá, el personal del equipo y cuerpo técnico, la prensa de Bogotá y demás, regresamos con ese sabor amargo en la boca porque a ese equipo se le podía ganar, con los once y luego con los diez, Millos tenía cómo ganarlo.

Puntada final: Arango, Ayron, Pedro, Henao, Cadavid… no hubo uno que saliera sonriente o tranquilo. Esa es la bronca que se necesita en este equipo, una bronca que los motive a ganarlo todo, a atropellar al que sea que se pare al frente, en la plaza que sea, del color que sea y con el nombre que sea. Millonarios no va a negociar los puntos, eso está claro y en lo personal, eso me deja tranquilo -más no conforme- pues este equipo seguro va a dar más porque tiene con qué. El miércoles el Tolima debe sufrir en Bogotá y que al final del partido y con los tres puntos en el bolsillo, los nuestros salgan con más bronca todavía listos para decir ¿quién sigue?

Eduardo Zabalaga Escobar
@ElCholoSoyYo