La doble moral
«La política es dinámica» es una frase que ha sonado con fuerza recientemente en este país. La dicen los Santistas y los anti-Santistas, los uribistas y los anti-uribistas. Parece una frase básica, obvia si se quiere. Pero es cierta, y aplica para cualquier ámbito de la vida, no solo para luchas entre fuerzas políticas. También aplica en el fútbol, sobre todo si del máximo ente se trata.
El presidente de Dimayor, Jorge Perdomo, ha emprendido una campaña de «convivencia», «fútbol en paz» y demás en los estadios del país. Se le volvió costumbre aparecer en cuanto medio de comunicación existe para impulsar su idea y promover la armonía en el fútbol. Al mismo tiempo, varios hinchas azules son retirados de forma violenta del estadio Metropolitano y enviados a un camión de la policía, por el «delito grave» de tener cédula con lugar de expedición la ciudad de Bogotá.
La noticia pasa inadvertida en absolutamente todos los medios de comunicación, con excepción del canal capital. Si hubiera sido al revés, el escándalo mediático hubiera sido tremendo. «La política es dinámica», dicen. Perdomo sigue, quiere armonía en los estadios, pero dice que está de acuerdo con los cierres de fronteras que promueven las alcaldías municipales, y al mismo tiempo, promueve que el fútbol se viva en familia «sin importar el color de la camiseta».
Dos días después de que muchos hinchas reportaran a la policía lo sucedido en Barranquilla (que no es la primera vez que sucede) nadie dice nada, ni siquiera luego de ver las evidencias de lo ocurrido, que fueron compartidas con pruebas en imágenes y en video. Dimayor, en cambio, pide a la gente que suba fotos a las redes sociales con hinchas rivales. ¿cómo? ¿Acaso en Dimayor no saben que Santa Fe anuncia la «no presencia» de hinchas azules mañana en El Campín? ¿acaso Perdomo ignora que en Cali, por ejemplo, se restringió el acceso de público visitante?
Esta es la doble moral del fútbol que hace que la política sea dinámica. La doble moral de un país en el que haber sacado la cédula en Bogotá es delito en otras ciudades. La doble moral que obliga a que las noticias sean informadas según conveniencia política, coincidencialmente, siempre con el afán de perjudicar a Millonarios. La doble moral que oculta cosas, la que promueve convivencia en los estadios mientras al mismo tiempo cierra fronteras.
PD: La doble moral también está presente en aquellos que se acomodan según el resultado para sobre actuar enamoramiento en las buenas o acabar con todo en las malas en Millonarios.
Twitter: @elmechu
