Revisión del VAR

La decadencia del FPC

El Mundo Millos no solo lo componen los hinchas, directivos, cuerpo técnico, jugadores, medios, funcionarios de Azul y Blanco, aliados y demás actores que componen a Millonarios. También debemos coexistir con otros actores y circunstancias que terminan influyendo en los resultados que alcance nuestro equipo.

Uno de esos actores es la Dimayor, el ente que coordina y gestiona todo lo relacionado al Fútbol Profesional Colombiano como «producto», contemplando a los árbitros, transmisiones y derechos, estadios, programación, entre otras funciones que tiene este ente rector. 

Veo con preocupación el deterioro de ese «producto». El Fútbol Profesional Colombiano, donde juega nuestro Millonarios, está en un momento penoso y crítico que requiere una reestructuración urgente. El contexto no puede ser peor: reprogramación recurrente de fechas; malas presentaciones a nivel internacional; estadios deteriorados y sin público; pésima distribución de los derechos de televisión; sospechas de amaños de partidos; deplorable nivel arbitral, incluido el equipo de VAR; una liga femenina semiprofesional; dirigentes envueltos en escándalos de corrupción; entre muchos otros temas que seguramente se me están escapando. 

Bajo este panorama coexiste nuestro Millonarios, afectando, por supuesto, su desempeño y participación en los torneos disputados. Quiero centrarme en algunos hechos puntuales de este fin de semana: las acusaciones de amaño de partidos por parte de jugadores de Patriotas y la penosa actuación arbitral del partido Envigado vs América.

¿Que esto cómo afecta el Mundo Millos? ¡En todo! El asunto de las apuestas está permeando con muchísima fuerza a nuestro fútbol y en cualquier momento puede perjudicarnos, esta vez no somos nosotros, pero podemos llegar a serlo y por eso hay que hablarlo y sentar precedentes. Este es un negocio gigantesco y peligroso.

Igualmente pasa con el desastroso nivel arbitral al que está expuesto el Fútbol Profesional Colombiano. En esto sí nos hemos visto afectados con decisiones, expulsiones, acciones de juego donde incluso con el VAR se toman malas determinaciones. El árbitro de ese partido en referencia desequilibró e influyó en el marcador final, con complicidad del equipo de VAR; además, fue completamente permisivo ante una vergonzosa situación de «quema de tiempo» de los jugadores de Envigado. 

Quien haya ganado o perdido me da completamente igual, y tampoco es acá venir a hablar de otros equipos, pero no podemos ser indiferentes ante la crisis de nuestro fútbol, porque repito, hoy no somos los directamente perjudicados, pero lo hemos sido y podemos llegar a serlo de nuevo.

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Los partidos a partir de ahora tendremos que ganarlos con suficiencia para tener un «colchón» ante las decisiones que puedan tomar el árbitro o el VAR. Tendremos que ser inteligentes en el juego y evitar en la medida de los posible jugadas polémicas o agresiones, porque no sólo tendremos que jugar con el rival sino también con el error (intencionado o no) de quienes «imparten justicia» en los partidos. Es la cruda realidad.

Hay situaciones estructurales en las que difícilmente podremos influir, pero hay otras para las que debemos estar preparados a partir del entendimiento del contexto en donde estamos compitiendo. Estas situaciones sí afectan a Millonarios y hay que hablarlas y preverlas, porque al fin y al cabo es el torneo que nos tocó, en el que somos un equipo gigante y en el que debemos seguir compitiendo a pesar de todos esos males que se presentan. Esto es lo que hay y a este nos tendremos que enfrentar, lastimosamente. 

Por Andrés Rey Hernández
En X: @andresreyhdez