Continúa el maleficio de Rionegro para Millonarios

El 29 de octubre de 2019 había sido la última vez que se jugó un duelo entre Águilas Doradas y Millonarios en Rionegro. Fue el último partido del tercer ciclo de Jorge Luis Pinto en el banco azul, Millos tuvo un hombre más en cancha durante casi 70 minutos y practicamente no pateó al arco. Fue un lánguido y triste 0-0 para cerrar esa campaña.

Casi tres años después, ahora con una masiva presencia de hinchas azules (unos mil tal vez regados en Oriental y Occidental), Millonarios volvió a visitar la cancha del Alberto Grisales, el único estadio de la primera división en la que no conoce el triunfo. Fue otro pálido y lánguido empate sin goles en el que el equipo de Gamero, que ahora llegaba líder y no eliminado como en 2019, tampoco pateó una sola vez al arco. La diferencia es que esta vez el expulsado temprano fue para Millos.

Elvis Perlaza fue el que vio la tarjeta roja, a los 35 minutos del primer tiempo y luego de recibir una amarilla que, minutos después vía VAR, el central Juan Pablo Alba la cambió por expulsión. Minutos antes, Águilas había anunciado sus intenciones con un gol anulado por fuera de juego. Millonarios solo se acercó con una acción de Dani Ruiz que terminó siendo derribado en el área y amonestado después por reclamar airadamente una pena máxima que no se sancionó.

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La roja a Elvis obligó a Gamero a sacar a Gómez por Cuenú, a mover a Juan Pablo como lateral por izquierda y a hacer una especie de rombo en la media cancha con Larry como cabeza de área, Pereira y Macka por los costados y Ruiz en el centro como media punta. En el segundo tiempo, con los cambios (Herazo por Luis Carlos, Cataño por Dani y Celis por Pereira), el equipo terminó con un 4-4-1 fijo para los minutos finales.

Y el resto del partido se resume en que Águilas no supo finiquitar y todo lo que le remataron a Montero fue controlado sin dar rebote, en que el equipo de casa tuvo un gran mérito al no hacer ver bien a Millonarios y evitar la presión alta y el juego de posesión al que estamos todos acostumbrados, en que nuestro equipo, literal, no disparó a puerta y en que los «laboratorios» en los tiros libres cerca al área siguen sin asustar ni sorprender a nadie.

Se fue el sexto Águilas – Millos en Rionegro y nada que el Embajador puede ganar en ese estadio, ni tampoco consigue ganarle como visitante al rival antioqueño. El maleficio de Rionegro continúa, el mejor Millos de los últimos años tampoco pudo terminar con el conjuro, complicado con un hombre menos más de la mitad del tiempo y sin patear al arco.

Twitter: @elmechu

Esta es la Ficha Técnica del partido