Hinchas Millonarios 2018

¿Qué pasó con la gente?

Jugadas 12 fechas del Apertura, Millonarios registra un promedio de asistencia de 13.900 espectadores por partido, más o menos el equivalente a los abonados del semestre (12 mil, según cifras reportadas por el club) más las cortesías. Contra Bucaramanga, 10.876 personas asistieron al estadio, unas mil del visitante según la información suministrada por la oficina de prensa de Azul y Blanco. Se entiende que era fin de semana santa y que el clima no había sido el mejor, pero igual los números son bajos.

Contra Corinthians, por Copa, el estadio recibió 25.070 asistentes. Es decir, siete mil menos que lo que se supone es el aforo total del estadio. Lo cierto es que los números de asistencia al estadio son bajos si se tiene en cuenta que se trata del equipo campeón y súper campeón de Colombia, que está jugando fase de grupos de Copa Libertadores y cuenta con la hinchada más fiel del país. Entonces, ¿por qué son tan bajas las asistencias?

Algunos la toman fácil y la emprenden contra el club argumentando precios caros, sobre todo el mes pasado en el que los reslutados no se dieron. Pero no es tan así. Dimayor, la policía, Tuboleta y Open (la empresa de logística) también son responsables de que el estadio no esté lleno como debería ser. Hay otra teoría, que apunta a que las cifras que entrega el club no son verdaderas (ese día de Corinthians el estadio estaba prácticamente lleno).

Entonces, ¿cuáles son las causas de las bajas asistencias? Lo analizamos.

Causa 1: Dimayor, el enrolamiento y los horarios

Desde el año pasado, cuando se informó del proceso de enrolamiento de Dimayor, el máximo ente del fútbol lanzó una amenaza: «quien no tenga el carné de enrolamiento no podrá ingresar a los estadios del país desde 2018». Ese mensaje trascendió tanto, que todavía hay gente que no sabe que el enrolamiento solo es obligatorio en Sur. Ante este tema, ha faltado comunicación por parte de todos los medios de Millos, y por parte del mismo club. Es importante que todos seamos portadores de información y llevemos la noticia a amigos y conocidos: el carné de enrolamiento no es necesario para entrar a Norte, Oriental y Occidental.

Otro tema son los horarios: con Transmilenio funcionando hasta las 10 pm un domingo, y con lo que conllleva esperar a tomar el auto para salir del estadio, bien sea por Blue Parking o en los parqueaderos aledaños, una persona puede terminar demorando 30 minutos en salir del estadio, así que pretender que un estadio se llene para un partido domingo 7:30 pm es ridículo. No se llenó para Millos – Nacional, menos se va a llenar para Millos – Jaguares, para el hincha no es fácil, menos si se asiste al estadio en familia.

Causa 2: Tuboleta y Open (la logística)

La combinación Tuboleta (venta de boletería) – Open (servicio de logística) es miedosa. Lo de los primeros es infame desde siempre, este año se conocieron casos de abonados que se perdieron uno o dos partidos al inicio de la temporada porque los abonos no estaban listos y nadie respondió por ellos. Open, por su parte, hace la tarea peor. Se han conocido casos de hinchas que tienen problemas al entrar por causas ridículas como que la cédula de la boleta no coincide con el titular, incluso hasta con boletas de cortesía.

Y ahora que mencionamos a Tuboleta, también se conocen casos de personas que realizaron el proceso de enrolamiento de Dimayor desde el año pasado y esta es la hora en la que los carné no aparecen y nadie da razón de ellos.

Causa 3: Precios vs. Comodidad

Sin ánimo de justificar al Club, los elevados precios de boletería son necesarios para mantener la nómina, teniendo en cuenta los altos costos de arrendamiento del estadio. Pero si se va a pagar un valor costoso por una boleta, lo mínimo que se espera es un buen trato. en ocasiones, las requisas de la policía son pasadas de tono tanto para hombres como mujeres, ¡cómo van a requisar a un niño de cinco años como si estuviera entrando a una prisión!

Adicional a lo anterior, que ha hecho que muchas personas prefieran ver los partidos desde la casa para evitar ese trato de las autoridades hacia ellos, sus novias(os) o sus hijos(as), están otros factores como que en Oriental no se respete la silla asignada o la reciente prohibición de maletas y bolsos, que ha espantado un sector de la hinchada que no tiene donde dejar sus pertenencias porque no lleva carro.

Entrar a un espectáculo deportivo es costoso en otros países, pero seguro no se registra semejante trato de policía, equipo de logística y hasta de Tuboleta, cuando quiere.

Causa 4: Economía

La situación del país en materia económica no está fácil. Hay personas que pueden ir al estadio porque son solteras sin hijos, no tienen dependientes y por eso les queda más fácil. Otros hinchas, por motivos económicos, no pueden ir a todos los partidos y por eso escogen a cuáles pueden ir. Muchos tienen familias con las que asisten al estadio y por eso los gastos se multiplican.

Para este tipo de escenarios, al club le faltaron estrategias como el abono de solo Copa Libertadores para motivar a la hinchada a asistir. También se debe incentivar más la tribuna familiar, que fue un éxito en las finales del semestre pasado pero ya no le han vuelto a dar el mismo bombo (por eso Norte ha estado casi vacía en los últimos tres partidos) .

Causa 5: problemas en la Comunicación

A veces se asumen cosas como obvias, pero cuando se tiene una hinchada tan numerosa, hay que estar informando todo siempre, partido a partido. En eso, en ocasiones, hay una falla en la comunicación por parte del Club. Ese es otro punto a reforzar. Millonarios necesita profundizar más sus anuncios de boletería, de información de logística como horarios de apertura del estadio, puntos de venta, promociones vigentes, servicio de Blue Parking, entre otras.

Asimismo, se debe hacer mucho énfasis cuando algo cambia, por ejemplo, cuando se levanta la medida de no ingresar bolsos al estadio o para explicar que el carné de enrolamiento no es necesario para la mayoría de localidades. El hincha se queda con la última imagen que tiene, y como nadie le informa que esa medida ya no existe, desiste de ir al estadio.

Como se puede ver, no es solamente «los altos precios de la boletería» lo que ha alejado a la gente del estadio. En realidad, es una combinación de muchos factores. La invitación es que todos y cada uno de esos hinchas de siempre hagamos la tarea de re-evangelizar al resto de la hinchada para que regrese al templo sagrado. Como explicamos anteriormente, cada uno de nosotros es un vocero de información del club y puede llevar las noticias a sus allegados, así como incentivarlos a volver a alentar al campeón, que lo merece.