La misión: no ser el «levantamuertos»

Este miércoles, Millonarios enfrenta al penúltimo de la tabla, que se acaba de quedar sin técnico, que solo ha ganado un partido en lo que va del campeonato, que quedó eliminado de la Copa Libertadores y que viene de perder con Jaguares como local. En situaciones normales parecería un partido fácil en el que los azules pueden -por fin- acabar con la racha como visitantes…

Pero si algo nos ha enseñado Millonarios, sobre todo en los últimos diez años, es que los partidos más complicados son esos contra rivales en crisis de resultados. La historia reciente indica que cuando tuvimos que enfrentar este tipo de contrincantes, suele pasar que perdemos, los medios arman el escándalo más grande del mundo y, tras ganarnos, el rival arranca una seguidilla de buenos resultados. Entre hinchas, ese efecto se conoce como «el levantamuertos»

Levantar muertos es algo que ha sucedido mucho. Sin ir más lejos, pasó en Montería apenas hace unas semanas, cuando Jaguares, que había perdido dos juegos seguidos en casa, se sacó la sal con un triunfo 0-1 sobre Millos.

Y ojo, que este Junior que vamos a enfrentar ya no tiene a Gamero, y los rumores indican que los jugadores le estaban haciendo sindicato. En palabras castizas: el Junior de mañana se va a jugar el partido del semestre contra nosotros, más si se tiene en cuenta que gran parte de la nómina «tiburona» pasó por el Embajador -y todos sabemos que, sin razón conocida, todo jugador que pasa por Millos siente más ganas de ganarle cuando se va del club-. Por más que llegue en el puesto 19, a este Junior no se le puede subestimar en la previa, al menos no nosotros.

Esa es la misión de Millos ante el Junior: no solo cambiar el pensamiento de hinchas y medios con respecto a su performance como visitante, sino zafar ese mote incómodo de levantar equipos en crisis. Lograr un triunfo que permita dejar al rival sumido en sus malos resultados y no traer una derrota que lo revitalice.

Twitter: @elmechu