Millonarios Nacional 2021

El día después: dos lecciones fundamentales

Pasarán muchos años más antes que la vídeo asistencia arbitral sea un elemento que aporte justicia en el fútbol. Cuando se trazan líneas imaginarias, cuando lo hacen seres humanos, falibles, hay riesgo de imperfección. Las máquinas han tomado mayor poder desde su creación y han reemplazado actividades humanas esenciales, desde la revolución industrial. Lo que nunca creímos fue que usarlas daría para tantos malos comentarios en un espectáculo o pasatiempo que, seamos claros, a veces saca la peor cara de nuestro ser.

Mientras ese tiempo pasa, quedan dos cosas por aprender.

La primera: se necesita de forma urgente y expedita que los jugadores tengan charlas con árbitros o instructores profesionales de fútbol, para que les expliquen, por ejemplo, por qué un fuera de lugar no está sujeto a la posición del último hombre sino al momento que parte el balón y que la situación espacial del esférico hace dictaminar si está o no delante de esa línea difusa. Solo en esa posible capacitación entenderán ellos y entenderemos todos que hay más de veinte excepciones a la posición ilícita. Adenda: normalmente nos quedamos con las jugadas de fuera de lugar que vienen desde atrás hacia delante, pero no reparamos en los balones laterales que terminan en el centro del campo. Así como pedimos capacitación para los árbitros, los demás actores también están y estamos en mora de aprender.

La segunda cosa pendiente: si voy ganando 1-0 y faltan ocho minutos más adiciones para terminar “el súper clásico del fútbol colombiano”; si se necesitan los puntos porque esos nos pueden dejar líderes del torneo en su fase más definitiva; si sé que no estoy jugando bien porque dos o más están lesionados o apenas regresando del departamento médico; si sé que este partido es fundamental “para la familia, para los que queremos, para la gente”, de acuerdo a la arenga previa, ¿entonces por qué carajos metemos un gol y le regalamos el balón al rival? Si costó un montón hacerlo, ¿por qué no entendemos que hay momentos donde no se juega más teniendo una mínima ventaja?

Preguntas y respuestas. ¿De qué se trata esto? De meter un gol más que el rival y ganar. ¿Lirismo? Al ballet. ¿Fútbol lindo? Brasil 1970. ¿No tenemos un perro viejo que sea capaz de manejar diez miserables minutos para obtener tres puntos? No. Ni el técnico.

No es momento para renegar quién lo hizo bien o mal. Se perdió el partido. Dilapidamos una linda oportunidad para ser líderes del torneo. El grueso de la hinchada quedó herida. Ha sido probado que ser “el capitán” no es sinónimo de ser “el líder”. Y Llinás jugó gratis.

Leandro J. Melo C.
Twitter: @lejameco