El Embajador volvió al gol y al triunfo
Un autogol fue suficiente para terminar con 577 minutos sin anotar y tres partidos sin ganar. Millonarios, todavía sin ser muy brillante y con los mismos problemas de creatividad en ataque, logró vencer al Unión Magdalena por la mínima para sumar sus primeros tres puntos como local del año. Ramiro Sánchez, un viejo conocido y querido de la casa, fue la figura del partido. Y Eduardo Sosa, en su primer partido como titular, terminó siendo el mejor de los Embajadores.
Ante los problemas de equilibrio y la ausencia de Gómez, Gamero optó por poner a Sosa desde el inicio, jugando por la izquierda, con Ruiz con perfil cambiado y con Macka y Sosa rotando entre el centro y la izquierda. Desde temprano, el venezolano le dio un nuevo aire al ataque azul, más dinámica, más velocidad, pero todavía carencia de variantes e ideas. Si bien el equipo mostró bastante mejoría, todavía cuesta generar opciones de gol. Y las pocas que tuvimos, encontraron en Ramiro al cerrojo que todos esperábamos por esa infalible «ley del ex» que para nosotros es bíblica.
El Unión replegaba con cinco en el fondo y cerraba espacios. Allá se notaba demasiado que estaban buscando no perder, cerrar los espacios y cuidar el cero. Es y será la estrategia de todos los equipos que nos enfrenten, locales o visitantes, los rivales ya van entendiendo que al Millos 2022 le cuesta demasiado cuando le hacen esa estrategia.
El segundo tiempo tuvo más de lo mismo, hasta que por fin se rompió el cero: centro desde la derecha y autogol de Gomes. Cuatro minutos después, Macka le rompió el arco a Ramiro tras un rebote por riflazo de Herazo. El capitán lo celebró y hasta palabreó al exarquero azul, pero después de toda la celebración todos nos dimos cuenta que el línea de Oriental nunca validó el gol, y que tras posterior revisión de VAR se volvió en fuera de lugar. Seguíamos 1-0.
Y tras esa acción, Millos decayó y Unión ganó en confianza. El conjunto de Santa Marta empezó a meterse en terreno azul, inclino la cancha a su favor, le quitó la pelota al azul y lo alejó del pórtico. Sin embargo, Álvaro Montero nunca se exigió ni tuvo que pasar angustias en el arco azul. El equipo visitante quiso, pero sus delanteros lucieron bastante limitados ante el sólido orden azul en defensa.
El dominio de la visita se mantuvo hasta que Gamero envió al campo a Yúber Quiñones (el único que le pega de afuera con convicción) y Ricardo Márquez. Con esto, Macka pasó a la derecha y Millonarios volvió a recuperar la pelota. Más adelante entró Pereira, quien casi hace el gol del año desde más atrás de la media cancha. El partido también tuvo tres opciones más para los Embajadores que sacó Ramiro, para terminar consolidándose como el mejor de los 30 que actuaron.
Al final, un triunfo justo para el equipo que más trabajó por el partido. Desde el resultado, es muy positivo volver a ganar, volver a marcar y registrar cuatro vallas invictas en cinco salidas. Desde el funcionamiento aprendimos que Sosa le da una dinámica distinta al circuito ofensivo, pero todavía cuesta la toma de decisiones al llegar a tres cuartos de cancha. Colectivamente el equipo sigue en deuda y la próxima semana vendrá el Cali, vigente campeón que comenzó muy mal la defensa de su título.
Twitter: @elmechu
Esta es la Ficha Técnica de la victoria