hinchas Millonarios Tunja

Tunja: hoy, mañana y siempre azul

Para cuando empezó el segundo tiempo, el estadio La Independencia ya había alcanzado su grado máximo de majestuosidad. La tribuna Norte completamente llena de gente y banderas, en Oriental, el sector hacia Sur, destinado a la Blue Rain, también estaba lleno y en medio de una fiesta. En ese momento ya había llegado todo el mundo desde Bogotá y el estadio era un solo carnaval, potenciado más adelante con los dos goles que le dieron el triunfo a Millonarios. Occidental estaba casi lleno, solo faltaron algunas sillas en Oriental Norte para que se diera el lleno total.

Poco importó que los 30 hinchas de Patriotas, ubicados en Sur, hayan explotado extintores de color rojo y verde cuando empezaba la etapa complementaria. Salvo eso, los locales no se volvieron a sentir, no había forma, eran 30 contra más de 10 mil azules. Los cantos, las banderas y la fiesta la puso la hinchada Millonaria, que como cada año, fue local en la capital Boyacense.

El estadio se llenó de azules, no fue solamente la gente de Bogotá, aunque sí la gran mayoría. También estaban los de Tunja, Duitama, Sogamoso y demás municipios de Boyacá, los que bajaron de Bucaramanga y Yopal, entre otros.

Fue una linda fiesta, pero que también obliga a la reflexión: ¿por qué no pasa esto en Bogotá? ¿por qué la Lateral sur no se llena en El Campín como se llenaron los dos sectores destinados a las barras populares en Tunja? Si llegaron más de 10 mil personas al estadio, ¿cuál es el motivo de que de local no se logren subir las asistencias?

Fue muy bonito ver el colorido de las tribunas llenas en territorio ajeno, qué lindo sería poder ver lo mismo en El Campín de nuevo alguna vez. Si 10 mil personas pueden tomar carretera y alentar, podrían hacerlo igual en la casa de siempre.