La peor presentación del año
El esquema táctico defensivo de Millonarios aguantó solamente 45 minutos. Santa Fe fue superior desde el minuto 1 y hasta el 95, pasó por encima del equipo azul y al final se quedó merecidamente con un clásico en e que Las Embajadoras jugaron muy mal, sin mostrar argumentos ofensivos y sin patear al arco en jugadas de balón en movimiento.
No hay nada que objetar ni se puede tapar el sol con un dedo. Si no pateas al arco es imposible ganar los partidos. Millonarios nunca pudo hacerle frente a Santa Fe, que jugó casi todo el partido con sus centrales en la media cancha, así de inclinado estaba el terreno de juego para las cardenales. Gauto y Salazar tomaban la pelota y hacían con ella lo que quisieran, ponían a jugar al equipo rojo por derecha, por izquierda y por el centro. Millonarios equivocaba todos los caminos, perdíamos en el juego corto, en los rebotes, en el uno contra uno. Era un «metegol-tapa» en el arco norte de El Campín y Karen Murillo era la figura.
El planteamiento de Millonarios, que parecía ser el de esperar y aguantar el huracán santafereño, resistió hasta el minuto 6 del segundo tiempo, cuando llegó el 0-1, de cabeza, obra de Tatiana Ariza, exMillonarios. La estructura planeada para aguantar no resistió más, ahora tocaba ver para qué estaba hecho este Millos. Tristemente, salvo un tiro libre de costado que casi se mete en el arco cardenal, la portera santafereña fue una espectadora más del partido. Las Embajadoras no tuvieron ningún argumento ofensivo distinto al pase largo «a la maldita sea» buscando ganar las espaldas con velocidad, algo que pasó muy poco, y de paso las Embajadoras se repetían constantemente en el fuera de juego.
Adicional a que futbolísticamente Millonarios nunca estuvo en El Campín, en los últimos diez minutos la cosa se puso peor. A los 82 llegó el segundo: Kena Romero ganó el uno contra uno, entró al área, remató y Karen, que era la figura, creyó que iba a centrar y regaló el ángulo. Y dos minutos después, cuando las E,mbajadoras todavía trataban de recuperarse, entró el tercero, Chacón se sacó a todo el mundo y definió. En dos minutos, Santa Fe cambió victoria por goleada, y Millonarios no solo estaba perdiendo el invicto, sino que también había cancelado la diferencia de gol lograda frente a Llaneros el jueves pasado.
Los minutos finales fueron como todo el partido: total dominio rojo y aguante azul. Era mejor esperar que se terminara todo para no recibir más goles. Fueron noventa minutos muy malos, la peor presentación de Las Embajadoras en 2021. Santa Fe lo ganó con total justicia y Millonarios nunca se encontró consigo mismo y mostró completa falta de argumentos.
Las cuentas son sencillas: ganarle a Fortaleza y esperar que este Santa Fe que hoy nos goleó derrote a Equidad para avanzar a la segunda ronda. Cualquier otra combinación de resultados hará que lleguemos a la última fecha con la calculadora y el escapulario en las manos.
Twitter: @elmechu
