El miércoles debe ser a muerte

Parecía otra victoria azul sobre Equidad. Parecía que los Embajadores tomaban ventaja en la serie luego del gol de Ayron en un momento clave, finalizando el primer tiempo. Parecía que Millos, como lo ha venido haciendo a lo largo del semestre, podría defender esa ventaja (corta, pero ventaja al fin y al cabo) para llevarse el partido. Desafortunadamente, en el segundo tiempo, el equipo azul se dejó dominar por el rival, que empató y casi sigue de largo. Al final, un 1-1 que deja la serie abierta y un mensaje a equipo e hinchada: el miércoles, en El Campín, hay que jugarlo a muerte para lograr las semifinales.

Estéticamente no fue un buen juego. Cortado, con más balones parados que en movimiento, lleno de faltas en todos los sectores del campo, sobre todo en el segundo tiempo. En la etapa inicial, aunque ningún equipo disparó a puerta, la pelota, por lo menos rodó a lo ancho de la cancha, sobre todo en la media cancha. Era un trámite aburrido pero no cortado. Entonces, Ayron anotó gracias a un remate al que el portero dio rebote, con la gran ayuda de Santiago Mosquera, quien tomó la pelota, no la dio por perdida, y regateó ante arquero y defensa rival hasta poder conseguir el centro para la anotación.

Para el complemento, el equipo azul se vino de más a menos. El partido se empezó a cortar, a llenar de faltas. Equidad se tomó confianza, consiguió el empate rápido (minuto ocho) y se fue a buscar la victoria. Si somos justos, el equipo local hizo más por el partido que los Embajadores. Vikonis salvó dos, otra se fue desviada luego de remate de Carmelo. En Millos, pocas opciones de gol, poco circuito de juego. Fueron 45 minutos que no se jugaron bien, que costaron.

Pudimos ganarlo al entretiempo, pudimos perderlo con el pitazo final. El 1-1 deja todo en stand-by hasta el miércoles. Ese día, habrá que correr cada balón como si fuera el último, habrá que salir con hambre de gloria, como contra el Cali, habrá que salir a demoler a Equidad, sin esperar que suceda lo que pasó hoy en el segundo tiempo. Ir por el primer gol, y no bajar los brazos sino buscar el segundo y el tercero.

Si no han adquirido sus entradas, vayan al TuBoleta más cercano. Necesitamos el aliento de todo un Campín furioso que cante los 90 minutos. Estas series también se ganan en las tribunas. La unión de todos es indispensable para que podamos seguir en este sueño de la estrella 15.

Twitter: @elmechu

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