Para no olvidar
Traer el pasado como una brújula de lo que es vivir este presente. Recordar, para saber en dónde se está. Queda poco para el final de este 2023-II.
Hace pocos dÃas, más exactamente el 10 de Octubre de 2023 se cumplieron 16 años de la gesta conseguida en Sao Paulo, ese 0-1 en el estadio Morumbà que nos dio esa alegrÃa de la que nos tocó agarrarnos con dientes y uñas por los turbios tiempos que se vivÃan en ese entonces en el equipo Embajador. Como hecho aislado pero en relación a esto, la semana inmediatamente anterior a la actual, en el Sin Libreto #35 (ver aquà https://www.youtube.com/watch?v=pShFrfuYqMs)  rememoramos a los Ãdolos históricos por década, y yo justamente hablé de Luis Zapata, Luis MORUMBI Zapata, el autor de ese victorioso grito de gol. El debate esa noche, giró en torno a otros nombres para escoger ese tÃtulo de Ãdolo de la década, y aunque Ciciliano fue el escogido por la mesa y con quien estuve totalmente de acuerdo, destacar lo que pasó ese 10 de octubre de 2007 era para mÃ, recordar un pasado, que en este momento se ve lejano, sobre todo gracias a un presente que parece recompensar todos esos años que tuvimos que rebuscar razones, para explicar a los demás lo que nos mantenÃa fieles al equipo.
Era una época en la que además de los malos resultados, otros motivos angustiantes alejaron a la gente de las tribunas, y la frustración era avasalladora pero la fidelidad era también completa. Recordar esos tiempos hoy, y con mi reciente experiencia de tener que vivir a Millonarios a lo lejos, desde un paÃs diferente, recordar se hace un ejercicio necesario. Necesario porque no me permito dejar de alimentar la sensación que me abraza cada vez que iba al Nemesio Camacho el Campin a ver al equipo, ni tampoco quiero olvidar a mis amigos, esos con los que el lazo de amistad se hizo más firme al compartir la pasión por estos colores. Amigos con los que ya no puedo estar en lo que suelo llamar el recinto sagrado. Algunos de ellos tomaron la decisión mucho antes de hacer las maletas y aventurarse en otras latitudes. Pero y en este ejercicio de memoria, recuerdo cuando me llamaron el 16 de diciembre de 2012 a decirme “¡Pooooor fiiiin! No sabes las ganas que tengo de estar allá†o la llamada del 17 de diciembre de 2017 en la que me dijeron: “En su cara fuimos campeones. Celebra Natha, aquà yo me voy a volver locoâ€. Y que en el 24 de junio de 2023 se convirtió en una videollamada, en la que les pude trasmitir con mi celular la llegada del equipo al Campin en medio de ese mar azul que era la carrera 30. Más tarde, esa misma noche, las llamadas llenas de sentimiento, cargadas de triunfo y las miradas al cielo invocando a nuestros amigos con los que quisiéramos reunirnos de nuevo a celebrar, pero las circunstancias no nos dejan. Ahora, entiendo cada una de esas llamadas, queriendo tener el don de la teletransportación.
Hacer memoria, para no olvidar. Hacer memoria, para conservar presente que aunque nos separen kilómetros de distancia, el estar con el equipo se mantiene en alto. Tal y como en ese momento de rebuscar razones en los 90`s y los 2000’s y que ahora bajo el comando de Alberto Gamero, se han vuelto menos difÃciles de encontrar. Los que vivimos esas épocas pasadas, sabemos lo que es lidiar con el deseo gigante de no volver a vivir esos momentos llenos de caos, pero, una vez más y ahora desde la perspectiva de alentar desde la lejanÃa, vengo a decirles que con los pies en la tierra pero siempre con la mirada y con la convicción que este presente es para DISFRUTAR, para compartir el bálsamo de la alegrÃa, de crear nuevos hinchas y de escribir una nueva historia que despierte al titán dormido del que nos aferramos durante 24 años, y que ahora su renacimiento parece latente. Se los repito, una vez más en otra de mis columnas, yo quiero creer.
Hoy después de varios dÃas, Millonarios vuelve al Campin. Hoy, sólo puedo abrazar a cada hincha de Millonarios que estando lejos, no se permite olvidar. A todos ustedes GRACIAS por permanecer, y hacer parte de aquello que hace a este club un gigante. Hoy, los abrazo porque tengo pulpita la sensación de ver en otro paÃs caminando a alguien con la camiseta, y querer correr detrás de esa persona a decirle “yo también soy hincha de Millonariosâ€. Ahora, que repetir tÃtulos rápidamente, es la sed; el aliento y la voz están dispuestos, para que en este remate de la liga y de la copa, se refrende que el camino a la gloria está latiendo de nuevo. Y la certeza de seguir… seguir junticos al equipo azul de la capital de Colombia. Estando afuera aprendà a nombrarlo como Millonarios de Colombia, porque es un equipo que traspasa fronteras. Gocen y celebren desde cada una de sus trincheras.Â
Por Nathalia MartÃnez
@natawillow