La Personalidad del «Chócolo»

Juan José Ramírez era casi desconocido en el fútbol colombiano hasta hace unos meses. Salvo algunas personas que siguieron de cerca su proceso o quienes cubrían recurrentemente la segunda división, ese nombre no estaba en el radar de nadie más.

Verlo llegar a Millonarios fue una grata sorpresa, más después de una notable presentación con su anterior equipo donde lideró el intento de lograr el título del Torneo de ascenso, que lastimosamente para Orsomarso se escapó desde los penales. Llegó con un perfil bajo, como un gran interrogante pero con unas condiciones notables, y en las últimas fechas tuvo su oportunidad y la aprovechó. Eso hacen los jugadores diferentes.

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Estoy gratamente sorprendido. No solo por su fútbol, sino por su personalidad dentro y fuera de la cancha. En el camerino no dudo en acercarse a los referentes como Cataño, incluso siendo su competencia por el puesto, para lograr adaptarse al grupo y aprender de los más experimentados. Lo vi en la previa, siempre con actitud y esforzándose para que la entrada en calor fuera lo suficientemente buena para la competencia. Y ni que decir de su desempeño en la cancha, uno de esos jugadores que tienden a desaparecer y que con pinceladas te resuelve un partido. Además, pide la pelota y se ‘hace cargo’ como si llevara 200 partidos en primera división.

«Chocolo», «Colorado»‘, «Boliqueso» o sencillamente Juan José, como lo quieran llamar, se empieza a ganar un espacio en el once titular de Millonarios. Hay que saberlo llevar, ser pacientes en los partidos en donde no esté fino y saberlo guiar mental y físicamente para explotar todas las cualidades que ha mostrado, por el bien de Millonarios como de él mismo. Lo mostrado en los partidos de Jaguares y Envigado dan muestra de que es un jugador que puede aportar y cuyo curva de crecimiento está acortandose. Pero repito, hay que llevarlo sin prisa pero con inteligencia.

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Me sorprendió hasta en la rueda de prensa contra Jaguares, cuando se atrevió a contradecir a un periodista y a sentar su posición con argumentos en un espacio que suele generarle presión a los jugadores (hay algunos que llevan muchos años y no han estado en ruedas de prensa). Esto parece anécdota, pero en el fútbol moderno hasta saber expresarse es una ventaja y es valorado por agentes y clubes. Y Juan José mostró elocuencia y capacidad de sobrellevar esa situación. 

¡Qué personalidad, Chocolo! La hinchada lo empieza a arropar y él retribuye ese apoyo con fútbol, actitud y ‘hambre’, algo que tanto se le pide a los jugadores de fútbol. Por más pases filtrados entre líneas, por más arengas a la tribuna para fomentar el aliento, por más fútbol y mejor versión del número 13 de Millonarios. Con calma y siempre teniendo los pies en la tierra, eso sí. 

Andrés Rey Hernández
@andresreyhdez