El día después: una victoria necesaria
Nada más placentero y agradable que volver al Campín. El horario de porquería no ayuda, es verdad, pero no se discute que cuando se ama algo con demasía, cualquier sacrificio vale la pena. Se respira un aire único donde el ambiente, impregnado por los bombos, los cánticos, las filas: es un halo místico que nos acompañará hasta el día que dejemos de ir.
Millonarios hizo respetar la casa porque fuimos vulnerados el año pasado y el fortín ya no lo era: parecía un castillo de arena. Ese nerviosismo de la primera fecha, sumando ceder puntos como constante del pasado reciente, fue el que jugó durante el primer tiempo. Los primeros 45 minutos fueron horrorosos. No solo por la expulsión de Jorge Luis Pinto (profe, por favor, bájele un cambio a los reclamos contra los árbitros: siempre van a ganar cualquier discusión) sino por la poca producción del juego. Bucaramanga, con muy poquito, nos lastimó con mala puntería.
Para la segunda mitad, el chip pasó de segunda a tercera velocidad cuando las jugadas lo pedían. El juego mejoró ostensiblemente y sin ser vistosos, Millonarios se acomodó mejor. Luego llegaron dos penales con seis minutos de diferencia. En el primero, una mano dentro del área fue el revulsivo para abrir el marcador. En el segundo, el tropezón de González Lasso con el último defensa parecía más penal que el anterior. Sin hablar de los rendimientos individuales, los embajadores ajustaron esos tres puntos tan necesarios, como locales, para acallar ese murmullo que a veces baja desde la tribuna. Llegó un poquito de tranquilidad. Una victoria necesaria.
Opinar sobre el arbitraje es muy difícil. Tal vez los hinchas hoy no hablan del perverso partido de John Hinestroza, porque nos pitaron dos penales, que a la postre fueron convertidos. Si algo sabemos del nivel de los colegiados en Colombia, es que carecen de herramientas fundamentales de trabajo, como un salario digno y mensual. Sin embargo, Hinestroza es aventajado: invitado a curso FIFA el año pasado, debería dar muestras de mejor orientación arbitral y entender que hay un único concepto sobre manos en el área, que emana de la International Board. Más que regalarnos dos penales, abogar por mejores centrales y asistentes es necesario en la “mejor cuarta liga del mundo”. Hágame el favor.
Profesor Freddy Rincón: hasta ahora lo vamos conociendo. El único reparo de sus declaraciones fue defender a González Lasso, excusándolo de su mal partido, porque “no hizo pretemporada”. Los jugadores se sostienen por su rendimiento y hasta el momento, sigue debiendo bastante, de acuerdo con el cartel que llegó. ¿Juan David Pérez hizo pretemporada con Millonarios?
Próxima parada: Montería, Estadio Jaraguay, sábado cuatro de la tarde, precioso horario.
Leandro J. Melo C:
Twitter: @lejameco