Wuilker nos metió en la siguiente fase

Se juega el tiempo de adición y hay córner para Always Ready. El portero Lampe sube a buscar el milagro. Tras varios sucesos, Wuilker Faríñez ataja un remate a quemarropa pero el central había decretado que la jugada no valía. «Hasta en fuera de lugar nos para todo este hijo de puta», dice un boliviano resignado. «Negros hijos de puta», gritan otros. La frutstración a flor de piel. Un venezolano, corto de estatura pero grande de espíritu, acababa de frustrar a todo El Alto.

Always Ready lo hizo todo para ganar, y ganó. Millonarios hizo todo para clasificar, y clasificó. En la mitad de toda esta historia está Wuilker, que lo atajó todo, literalmente todo, para que el Embajador pueda instalarse en la siguiente fase de la Conmebol Sudamericana. A Wuilker le patearon desde cerca, le patearon desde lejos, le cabecearon… y estuvo más grande que todo el Hernando Siles. Es como si el hecho de jugar partido internacional lo potenciara, Wuilker fue más alto que La Paz, Wuilker fue más grande que el Hernando Siles, Wuilker le puso calor al frío boliviano. Wuilker eliminó a Always Ready.

Tan inmortal fue la presentación de Wuilker, que hasta se dio el lujo de llamar a Dios para apelar a la justicia divina: el central ecuatoriano se inventó penal y expulsión para Bertel a los 62 y Faríñez atajó. No fue solo detener un penal, fue también cambiar la historia del partido porque jugar con 10 en La Paz y perdiendo es prácticamente morir.

Así, de la mano del mejor Faríñez en 2 años, Millonarios aguantó la ventaja en Bogotá y clasificó a la siguiente fase de la Copa Sudamericana. El rival lo conoceremos en mayo, por eso tenemos tiempo para enfocarnos 100% en la Liga y buscar recuperar lo perdido.

Querido Dios: gracias por permitirme tener a Wuilker Faríñez con una camiseta amarilla defendiendo mi escudo. En los partidos grandes es cuando los jugadores grandes se vuelven inmensos.

Twitter: @elmechu

Esta es la Ficha Técnica del partido