El secreto detrás del penal que atajó Faríñez

Wuilker Faríñez fue, por mucho, la gran figura de Millonarios en el partido ante Nacional del domingo anterior. Su presentación solamente fue superada por la del central, Mario Herrera. El venezolano atajó, por lo menos, cinco jugadas claras de gol de Nacional, entre las cuales estuvo el penal que detuvo a Dayro Moreno en el segundo tiempo. De hecho, es muy posible que el ex-Millos haya soñado con él, porque no vio ni media.

Cuando terminó el partido, los medios le preguntaron a Wuilker por la jugada, a lo cual el venezolano respondió que «Dayro ya estaba analizado con mis compañeros y el cuerpo técnico. Lo trabajamos muy bien. Domínguez me dijo que lo aguantara». En la toma de televisión de la jugada, se observa que «Carachito» es el primero que se acerca a felicitar a Faríñez por haber conseguido su primera pena máxima atajada en Colombia.

No fue casualidad. El portero azul no mentía. El gran secreto de ese penal atajado está en Juvenal Rodríguez, el preparador de arqueros de Millonarios quien, silenciosamente, ha hecho un trabajo estupendo con los guardametas azules desde hace varios años. Rodríguez no solamente se encarga de entrenar a los porteros en cuanto a lo físico y lo táctico, también cumple un papel importantísimo a la hora del análisis a los rivales.

Una hora antes del partido, Juvenal llegó a la sala de prensa con su laptop (un MAC) para terminar de trabajar su preparación del rival. En su PC; el preparador de arqueros tenía guardados todos los videos de los penales ejecutados por Dayro Moreno desde que firmó con Nacional. Allí, detenidamente, se dedicó a observarlos uno por uno, para armar un único video con el compilado.

Mientras se trabajaba en la generación, vimos varios de los videos. Ahí escuchamos el dictamen: «Miren, Dayro siempre espera al portero. Cuando el portero no escoge palo, patea a la izquierda para asegurarlo y casi siempre rastrero. Esa instrucción ya la tiene Wuilker, hay que aguantarlo hasta el último instante» comentó Juvenal. Unos minutos después, como si el destino lo hubiera querido, su teoría se puso en práctica, Dayro aguantó, Faríñez no se movió, el delantero hizo la típica y pateó a su izquierda y allá llegó el gran portero azul para poner a celebrar por segunda vez a los hinchas.

Sí, Millonarios tiene dos grandes porteros que resguardan el arco y son garantía para atajar los penales. Pero hay una satisfacción adicional, y es la de saber que detrás de ellos está un gran preparador de arqueros que hace un trabajo fenomenal de forma silenciosa. A veces su trabajo pasa desapercibido por el hincha, pero debemos reconocer y aplaudir la labor de Juvenal como parte del cuerpo técnico Embajador.