Millonarios Boyacá Chicó 2023

Rezar y pecar

En el que fue fácilmente su partido más flojo de 2023 -y después de un gran clásico- Millonarios empató contra Chicó a un gol y, aunque con 30 puntos y la combinación de resultados en la fecha podría clasificar con antelación, dejó una imagen muy pobre en la retina del hincha.

Solamente Jorge Arias por Juan Pablo Vargas y Larry Vásquez por Daniel Giraldo fueron las novedades de un equipo titular elegido por Alberto Gamero para enfrentar la fecha 19. Los primeros minutos fueron todos azules y los hinchas pudimos ver al verdadero Millonarios; el que ataca, el que somete al rival, el que crea jugadas, el que anota. Cuando la media volea de Leo Castro encontró un toque certero de Edgar Guerra y el primer gol, todos los pronósticos hacían sentir que vendría una goleada feliz.

Un penal que no nos dieron y un gol anulado por una rodilla adelantada de Beckham seguía manteniendo a todo el público helado por el clima pero a gusto por el fútbol visto; hasta que en una jugada de pelota parada y una marca perversa Wilmar Cruz anotaba el empate para el equipo boyacense con dos toques dentro del área y con los defensas azules como testigos pasivos.

De ahí en adelante la constante de Millos fue el desespero y la pésima entrega. Fútbol sin peligro, ideas cortas en creatividad y en distancia del balón entre líneas, y tranquilidad e incluso insolencia del visitante hicieron del resto de la primera etapa y todo el segundo tiempo un mar de frustración. Incluso el profesor Gamero equivocó la decisión de las sustituciones, sacando a Juan Carlos y a Edgar, en lugar de un cambio cantado de un Mackalister errado y divorciado con la pelota; cambio que a fin de cuentas tendría que hacer, ya cuando los últimos minutos no alcanzaban para cambiar la historia.

Ni un Paredes sorpresivamente torpe, ni un Giraldo irrelevante, ni un Uribe impotente ni un Villarreal impetuoso pero biche pudieron deshacer la sentencia de una actuación floja de todo el equipo, que se fue de la cancha peleando con la terna arbitral y con una hinchada tras de ellos decepcionada por una noche para el olvido.

Millonarios pecó contra Unión y rezó contra Santa Fe, pero volvió a pecar y a ceder puntos en casa contra un equipo eliminado pero, seguramente por lo mismo, ordenado, tranquilo y frentero. Ahora, le queda preparar su visita con nómina mixta a un candidato al título en Cali y con la mirada de reojo hacia la semifinal de Copa. Sin ánimo ni aire en la camiseta, pero con toda la responsabilidad de recuperarse y hacer brillar la chapa de campeón.

Carlos Martínez Rojas
@ultrabogotano