De nuevo entre los ocho

Un gol de camerino de Andrés Cadavid, cuando todavía muchos se acomodaban en su silla (algunos ni siquiera habían entrado al estadio) fue suficiente para que Millonarios consiguiera su segundo triunfo como local en la Liga y se instale de nuevo entre los ocho clasificados, ya que consiguió ganarle a un rival directo por la lucha por los Playoffs.

Del partido, quedará para el recuerdo la cantidad de cánticos, pancartas y trapos de varios grupos de hinchas en todas las tribunas en protesta contra Amber Capital, Gustavo Serpa y Enrique Camacho. También las múltiples situaciones de gol creadas por Millonarios que no entraron por el exceso de ansiedad de los nuestros al momento de definir o por el buen trabajo del portero rival.

Por lo demás, fue una victoria tranquila. El gol tempranero contribuyó a que los 89 minutos restantes del partido fueran de comodidad. No hubo un solo momento en el que el triunfo haya estado comprometido, o alguna acción de gol que haya hecho levantar a la gente de su silla a sufrir. Vikonis fue un espectador más, y lo único que faltó fue que esa victoria fuera más abultada.

Después de diez días de tormenta, llegarán dos semanas de calma antes del partido que nadie quiere perder. Dos semanas en las que la mala leche quedará en pausa, en las que el plantel podrá seguir trabajando en la definición y en las que, esperemos, las redes sociales no se llenen de sobreactuación desmedida. Siempre será importante ganar.

Twitter: @elmechu

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