No hay margen de error

La semana pasada, en este mismo espacio, habíamos escrito que los ahorros se habían acabado y que, para mantenernos en zona de clasificación, debíamos sumar en Pasto. Pues bien, luego de la derrota, la tercera en serie, y con la estadística de tener un punto de los últimos 15 disputados, lo normal era que los rivales aprovecharan y nos pasaran.

Por eso, Millonarios comenzará la semana en la décima casilla, parcialmente eliminado de la liguilla final, y a la espera de lo que pase con Patriotas este martes: si el equipo de Tunja no pierde en Barranquilla, nos desplazará un puesto más en la tabla, es decir, que Millos arrancaría la jornada 14 en el puesto 12.

Las alarmas están encendidas, sumar en Pasto era una obligación y no se logró. Sumar en Envigado, ahora, más que obligación, es una necesidad. Con 17 puntos, necesitamos 16 de los 21 en disputa para asegurar un cupo matemáticamente en las finales. Hay un déficit de cuatro puntos perdidos en El Campín que se deben recuperar, sí o sí, en Envigado, Manizales y Cali. El otro juego de visita restante es en Techo contra Tigres, partido que, en las cuentas de todos, es de tres puntos fijos, por eso no se cuenta.

Los torneos cortos tienen esa particularidad: si das ventaja, te la cobran con intereses. En este tipo de campeonatos ningún equipo puede darse el lujo de perder 14 puntos de forma consecutiva. Los rivales aprovechan. Esto fue lo que pasó con este Millos que cuando terminaba marzo ilusionaba y ahora, a mediados de abril, despierta incertidumbre.

Así quedó la tabla, disputadas 13 jornadas.