Fernando no tuvo piedad

El hincha estaba prevenido, no lo decía duro pero lo sentía. Millonarios visitaba una plaza hostil a nivel clima y enfrentaba a un equipo colero, que estrenaba DT y no había ganado en todo el año. Con el antecedente reciente de ser «el levantamuertos», en el ambiente había una especie de temor de que pudiera volver a ocurrir en la noche de Barranca.

Afortunadamente, los fantasmas de revivir otro muerto duraron solamente 24 segundos, el tiempo que pasó desde que sonó el pitazo inicial y hasta que Fernando Uribe tomó una cortesía de Hanyer Mosquera para definir a la salida del portero y poner el 1-0 parcial, que automáticamente destruyó cualquier planteamiento que hubiera hecho el nuevo DT de Alianza, que debía y deberá dirigir por Whatsapp por lo que queda del semestre.

Escenario perfecto para el equipo de Gamero, que podía dosificar cargas y defender el resultado, incluso jugando sin sus extremos titulares. De hecho, Édgar Guerra, cumpleañero, tuvo en sus pies el segundo de la noche, quiso picar la pelota y la mandó apenitas afuera. Después de esa jugada, Millos no atacó más y Alianza llegó con lo poco que tenía, y Vargas tuvo par atajadas para salvar el cero en su valla.

Para el segundo tiempo, Gamero mandó al campo a los dos habituales extremos titulares. El Embajador jugó en zona aurinegra los primeros diez minutos, hasta que, otra vez, una gentileza del local, esta vez de Chica, le dejó otra vez la pelota servida a Fernando. Solo que ahora, el goleador azul no solamente definió, sino que quiso adornar el papayazo con finta y golazo: levantó la pelota, le hizo un sombrero al único marcador que tenía, y sin dejarla caer, empalmó un remate de zurda que venció a Grazziani. GO-LA-ZO.

Iban 11 minutos apenas, faltaba una eternidad todavía, Millonarios no volvió a atacar con riesgo. Por momentos se defendió con la pelota, por momentos dejó que Alianza se le viniera encima. Nos podíamos quedar toda la noche, quizá dos noches más si se quiere, y Alianza no iba a hacer ni medio gol, no tenía los argumentos ni la paciencia necesaria para hacerlo, menos después de recibir dos goles gracias a dos regalos, menos siendo el último de la tabla y con el ánimo futbolístico en el suelo.

Millos volvió a ser conservador, recibió dos detallazos de su rival y tenía en el frente de ataque a un Killer que no perdona esa clase de regalos. Fernando no tuvo piedad, y Millonarios volvió a zona de clasificación.

Twitter: @elmechu

Esta es la Ficha técnica del partido.