El show del autogol
Una noche bastante especial se vivió en El CampÃn. Según mi amigo Carlos Forero, es apenas la segunda vez en la historia que un partido de fútbol profesional en Colombia tiene tres autogoles, y según nuestro archivo es la segunda vez que un equipo rival anota dos veces en propia puerta en un mismo partido. En la previa del viaje azul a los Estados Unidos, la banda de Gamero sumó su segundo triunfo en la Liga, registra puntaje perfecto y lidera la reclasificación. Apenas para una semana en Disneyland.
De entrada, el QuindÃo de Quintabani parecÃa timorato y defensivo hasta que sacó las garras. Hasta la lesión de Yani Quintero, a los 23 minutos, el equipo visitante fue tácticamente mejor que nosotros. Lograba desconectar los circuitos ofensivos y acercarse con mejores argumentos. En la mitad, el primer gol de la noche, a los 14: centro desde la derecha y Macka, que volvÃa para colaborar en marca, metió el mejor cabezazo de su vida, pero en propia puerta. Nada que hacer para Vargas, 0-1 abajo.
Después de la salida de Yani, el trámite del partido cambió y Millonarios empezó a inclinar la cancha a su favor. Era normal ver a diez de los once jugadores azules parados más adelante de la media cancha y ante la falta de espacios en tres cuartos, era Juan Pablo Vargas el que ponÃa a jugar a sus compañeros con pases rompelÃneas, y por derecha la sociedad Emerson-Román empezaba a carburar. Poco a poco, el portero visitante se iba convirtiendo en la figura del partido.
Hasta ahà era derrota por la mÃnima con un autogol. Recién comenzaba el complemento, a los cuatro minutos, llegó el empate: centro desde la derecha, cabezazo de rechazo que pega en Figueroa y la pelota al fondo. Era 1-1 con dos autogoles, revisamos el archivo y encontramos un antecedente por allá en 1980, en una derrota 1-4 contra el Cali.
Pero si de por sà ya era raro tener dos autogoles, mayor fue la sorpresa cuando llegó el 2-1, otro centro y otro gol en contra, esta vez de CarabalÃ, para el 2-1 a favor, que era justo por lo mostrado en el terreno de juego. Ahà ya se rompieron todos los récords y estadÃsticas, este escenario loco solo habÃa pasado una vez en la historia.
QuindÃo quiso reaccionar pero ya no tenÃa ni el músculo futbolÃstico ni el estado fÃsico. Millonarios siguió jugando con sus lÃneas adelantadas y pudo encontrarse más goles en el camino. Al final, la victoria es más que justa y merecida para nuestro equipo, que hizo de Estacio a la figura del juego y ganó con suficientes argumentos la batalla del miércoles, asà los goles hayan sido todos en contra.
En una noche atÃpica, rara y loca, Millonarios sumó su segundo triunfo del torneo y ahora viaja a Estados Unidos a enfrentar al Everton. Este 2-1 sobre el QuindÃo será recordado como el partido del show del autogol.
Twitter: @elmechu
Esta es la Ficha Técnica del partido.