Diego debutó en la red
CorrÃa el minuto 27 de la primera etapa. Ómar Bertel recuperó una pelota por la izquierda y se la tocó a Diego AbadÃa en tres cuartos de cancha. El delantero recibió, avanzó unos metros, miró al frente un instante y se decidió: soltó un latigazo de media distancia que se metió en el ángulo inferior derecho de Graterol. Era su primera comunión con las redes contrarias.
De inmediato, Diego salió corriendo hacia la zona donde estaba ubicada la cámara de TV, mandó un beso y soltó un «te amo». Emerson lo abrazó desde atrás con la misma sonrisa gigante, como la que tenÃamos en ese momento todos los hinchas de Millonarios, que añorábamos y soñábamos con que Diego pudiera anotar su primer gol como profesional.
Ese gran remate de AbadÃa iba con el impulso de toda la hinchada de Millonarios, que nos quedamos con el grito en la garganta desde el partido pasado con los remates que pasaron cerca y que estábamos esperando desde el año pasado para que el goleador Sub20 2019 pudiera por fin probar las mieles del gol a nivel profesional.
A Diego se le notaba, justamente, esa ansiedad de convertir su primer gol. HabÃa tenido opciones muy claras el año pasado y en Barranquilla frente a Junior. En el partido con Bucaramanga hizo un gran trabajo desde lo táctico y solo le faltó redondear su presentación con gol. El desquite vino por fin frente a los «escarlatas», y aunque el resultado final no dejó un feliz final, quedó la satisfacción de que la ansiedad del primer gol ha terminado.
¡Felicitaciones, Diego! Y que este sea el primero de muchos, y que de ahora en adelante entren todos.
Twitter: @elmechu