¡Triunfazo en Bucaramanga!

¡Triunfazo! Por donde se le mire, porque por cualquier trasfondo que se le quiera dar, lo que hizo Millonarios hoy en la cancha del Alfonso López fue espectacular. Porque por primera vez en toda la era Russo se hicieron tres goles como visitante, porque el equipo llegaba golpeado por perder el clásico y recibió un gol casi que de camerino, parecía nocaut, pero el plantel tuvo el temple para reponerse, empatar, remontar, seguir de largo y bailar.

Bucaramanga pegó primero, cuando apenas corrían seis minutos de juego en el renovado estadio de la capital santandereana. Golpe duro al ego de un Millonarios que ya estaba herido. Pero el equipo no se vino abajo. Al contrario, fue creciendo poco a poco en la cancha, se fue agrandando, encontró el empate con un golazo antes del final del primer tiempo y comenzó el segundo tiempo con otro golazo para dejar al rival sin reacción (dos acciones determinantes por los momentos).

Después, Duvier Riascos puso el tercero, otro golazo que selló la fiesta. Lo que estaba preparado para ser un gran espectáculo de la gobernación de Santander y de la alcaldía de Bucaramanga terminó siendo una fiesta de un equipo azul que estrenaba uniforme suplente de color negro y gris, y lo hizo como lo pide su historia.

Todos los triunfos se disfrutan, pero este debe ser tomado de forma especial. Fue la primera victoria del Finalización, la primera vez que se hacen tres goles afuera de Bogotá en todo el año, el primer triunfo en Bucaramanga en siete años (once si se tiene en cuenta solo Liga). Además, con el factor adicional de haber remontado un resultado adverso, sinónimo de jerarquía.

Millonarios visitó el nuevo estadio de Bucaramanga y dio una lección de autoridad. Fue superior en el marcador y también en el trámite del partido durante los últimos 84 minutos. Partidos como este son los que quiere ver el hincha siempre. Por eso y por todo, este 3-1 fue un triunfazo.

Twitter: @elmechu