Faltó jerarquía e inteligencia
Faltaban ocho minutos para el final del partido. Bertel tiró un centro desde la izquierda y Arango cabeceó al piso para poner el 1-0. Millonarios había jugado un gran segundo tiempo, tenía neutralizado a su rival, había generado las mejores opciones de gol hasta que por fin Chicho logró romper el cero. Hasta el mismo Gamero lo dijo: «no veo cómo Nacional nos podía hacer un gol».
Parecía la segunda victoria en línea del Azul sobre el verde, al minuto del gol, otra vez Arango tuvo la opción de seguir de largo pero le señalaron fuera de juego. En ese momento, Millonarios no solo ganaba el partido que todos queremos ganar, también se trepaba al primer lugar de la tabla de posiciones. Faltaban seis minutos, era la noche soñada, moñona…
Pero a este Millonarios de Gamero le volvió a pasar un viejo síndrome que ya se había visto desde el año pasado: hace un gol y se desespera, pierde el libreto, se asusta, como que no puede creer que de verdad vaya ganando. Lo dijo Fernando Uribe, la otra gran pérdida que nos dejó la noche, había que aprovechar el desespero de ellos, no desesperarnos nosotros. En la primera incursión verde tras el 1-0 llegó el 1-1. Y así, en cuestión de segundos, se evaporó nuestro fugaz liderato del campeonato.
Millonarios perdió los papeles y perdió la cabeza. Nacional, que la pasaba mal hasta el minuto 82, se montó en el partido. Dieron el tiempo de adición y en el 90+3 llegó el 1-2, en una jugada inmensamente polémica que validó el VAR y que todavía deja muchas dudas. Diez minutos antes, Millos ganaba y era el puntero de la Liga, ahora el Embajador perdía, y el verde paisa pasó, sin querer queriendo, a ganar el partido y asumir el primer lugar del campeonato.
La fácil sería decir «nos robaron» como único argumento, pero no puede ser que hagas un gol faltando menos de diez minutos y te dejes remontar. Faltó jerarquía e inteligencia para mantener un resultado. Fue inevitable recordar ese clásico postpandemia del año pasado que Millos ganaba con un hombre más en la cancha y se dejó empatar en tiempo de adición. Resultó que Millonarios hizo un gol y perdió la cabeza, después perdió el partido, perdió los puntos y perdió la punta. Y pasamos de ser líderes a ser sextos, y perdimos el partido que más nos duele perder, y decir que no duele sería mentir.
Twitter: @elmechu
Esta es la Ficha Técnica del partido