Diez minutos fatales
Cuando terminó el primer tiempo todo en Millonarios era magia. El equipo de Pinto, con muchos cambios en la nómina, sin muchos titulares habituales y con un 5-4-1 como módulo táctico, ganaba el partido por 1-0 con un golazo de Cristian Arango y haciendo total merecimiento en la cancha. Estábamos pasando a ser los únicos lÃderes del campeonato.
Pero como se lee en el tÃtulo de esta crónica. Los diez primeros minutos del segundo tiempo fueron fatales e hicieron que toda la afición azul en el mundo Millos cambiara las sonrisas por las caras largas y las alegrÃas por las amarguras. Esos diez primeros minutos del complemento, para sorpresa de todos, nos dañaron la jornada.
No se sabe qué pasó. Quizá el equipo entró dormido al campo. Quizá los durmió el calor que hacÃa en Santa Marta. Todo fue demasiado rápido: el empate, la falta que fue sancionada como penal, el cobro que lo cambió por gol y la expulsión de Carrillo. En menos de nada, Millonarios pasó de ganador a perdedor con un hombre menos en la cancha.
Pinto quiso mover la nómina. Mandó al campo a Jaramillo, Hansel y Juan David, los titulares habituales; cambió el 5-4-1 del primer tiempo por el clásico 4-2-2-1 (por la expulsión). Trató con esto que el equipo azul volviera al partido y no tuvo éxito: si bien Millonarios dominó, el portero visitante no tuvo acciones de riesgo para un potencial empate.
Millonarios lo ganaba con autoridad, pero empezó el segundo tiempo y en apenas diez minutos fatales todo se vino al traste. Este equipo, que habÃa conseguido remontarle con jerarquÃa a equipos como Cali, Jaguares o MedellÃn, ahora se vio falto de jerarquÃa ante el Unión, que pelea descenso.
Perdimos la oportunidad de quedar como lÃderes únicos de la Liga en un partido inentendible e inexplicable. Ahora sigue pensar en el clásico, sobre todo, pensar que podemos volverle a ganar a Santa Fe después de 2 largos años. La historia y el presente lo piden.
Twitter: @elmechu
Esta es la Ficha Técnica del partido.