Categoría, contundencia y excelencia: Millos a octavos

A los 39 minutos del primer tiempo, cuando el partido ya estaba 2-0 y se había terminado la celebración del gol de Ovelar, la hinchada empezó a cantar durísimo «Volveremos volveremos, volveremos otra vez, volveremos a la cancha a acabar con Santa Fe», el canto grito de batalla que siempre suena en la antesala a un clásico. Quedaba más de la mitad del partido todavía, pero la serie ya estaba liquidada y lo sabíamos todos. En el segundo tiempo solamente fue el remate de la fiesta: goleada azul en una noche prácticamente perfecta para sellar la clasificación a los octavos de final de Sudamericana.

Fue una noche muy bonita para el equipo y para la gente. Fue la primera victoria en El Campín del semestre, y vaya que fue hermosa. Era la primera vez que jugaban juntos los cuatro extranjeros del plantel (por torneos colombianos nunca se va a poder por reglamento), la primera vez que en ataque se juntó el tridente Hauche – Ayron – Ovelar con los mejores resultados porque los tres hicieron gol. Desde el minuto 0, Millonarios fue mucho más que General Díaz, hizo ver livianito al conjunto paraguayo y terminó aplastándolo, como debía ser.

La cuenta la abrió Hauche con un gol de pecho tras centro de Carrillo. Ovelar puso el segundo a los 37 minutos y hasta ahí llegó la esperanza de los paraguayos. En el segundo tiempo, Ayron puso el tercero luego de varios remates en el área y Mackalister selló la goleada con una peculiar celebración: pidió prestada la cámara de uno de los reporteros gráficos y sacó una foto a alguien que Duque le señaló en Occidental. Fueron cuatro pero pudieron ser muchos más.

La categoría mostrada en la cancha se trasladó a la tribuna, sobre todo en Oriental. Cantos de ole de un lado al otro, aplausos para todos y cada uno de los jugadores, palmas y gritos de aliento cuando se equivocaron (a Faríñez, a Ayron, a Matías) y ovaciones para Marrugo y Carrillo cuando abandonaron el campo. Se sabe que una noche es perfecta futbolísticamente cuando hasta en la tribuna se escuchan los mismos cantos y no varios al tiempo.

Con categoría, contundencia y excelencia, Millonarios se metió en los octavos de final de la Conmebol Sudamericana y deberá enfrentar a Santa Fe para seguir en carrera continental. Ojalá frente a los «cardenales» se repita la misma historia y podamos volver a vivir una noche como la que nos regaló el equipo ante General Díaz, una invitación a soñar que este plantel está para grandes cosas.

Twitter: @elmechu

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